VIVE GAMBIA II |TRAVEL
agosto 04, 2019Y aquí viene el segundo post de este maravilloso país donde tengo que confesar que este día fue muy duro, mucha historia en ella y mucho sufrimiento, pero no deja de ser eso, su cultura y la HISTORIA de Gambia. Si tienen la oportunidad de conocer Gambia no dejen de visitar los lugares que os muestro, porque es muy enriquecedor a la par de muchos sentimientos encontrados en ellos.
Día 2.
Después de un maravilloso desayuno en nuestro hotel Coco Ocean Beach Resort & Spa, nos dirigimos a una aventura más y como no, parada obligatoria en el Arco de Banjul.
Este arco fue construido para conmemorar el golpe de estado que devolvió la democracia al país, gracias al actual presidente en 1994. Tanto es así, que cada 5 años se celebra elecciones y sigue el mismo presidente, es muy querido y respetado en Gambia.
Y seguimos a nuestro próximo destino, coger el ferry desde Banjul a Barra.
Ahí nos dirigiremos hacía el Fort Bullen, un fuerte por donde pasaron los esclavos para ser liberados. Pero durante el camino hacia el fuerte nos encontramos con mil niños hiper cariñosos y muy felices.
El fuerte fue llamado como Fort Bullen, ya que Gran Bretaña jugó un gran papel aquí para tratar de poner fin al comercio de esclavos. Hay objetos del pasado dentro del fuerte y lo mejor es que ayudaba a proteger la entrada al río Gambia y así evitar que los barcos se llevaran esclavos.
Vale la pena la visita, es corta y tiene un museo en activo y el fuerte es parte de Kunte Kinteh. Pertenece al Patrimonio Mundial y fue una fortaleza para luchar contra la esclavitud.
Y al acabar la visita aquí nos dirigimos hacía Juffureh donde nos embarcamos en una aventura en una barca gambiana (experiencia maravillosa de las chicas para subir y bajar en ella) hasta la isla James llamada Kunta Kinteh por la famosa serie que se grabó ahí.
Es una isla pequeña donde se mantienen pocos restos en pie de los calabozos donde aguardaban los esclavos para embarcarlos rumbo a América. Es un emotivo lugar que no dejaba de sentir angustia nada más pisarla, deseando estaba de irme. Pero es una visita obligada, se lo debemos a toda esa gente que tuvo que pasar por ahí con tanto sufrimiento.
A la vuelta de la isla almorzamos en Juffureh en el único lugar que había, pero decir que se come muy bien. Ahí hay muchos lugareños que venden cositas artesanales, puro arte y que recomiendo que adquieran algo. Ya en Banjul fuimos a cenar a un nuevo lugar llamado Shiráz, un libanés exquisito. Y al hotel a descansar que el día 3 ya nos movíamos hacía la selva.
¿Qué tal os ha parecido este día? ¿Algo duro e interesante verdad?
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